El Arte de la Mesa

A continuación te presento algunos consejos prácticos, según nuestra experta en protocolo y etiqueta, Esther Peña, para que tu mesa este divinamente puesta:
El Mantel: La mantelería debe ser blanca si es para una gran ocasión y de colores pasteles para las menos formales. Si los platos y decoraciones son muy coloridos se puede prescindir del mantel. Tanto los platos como las copas, deben ser del mismo modelo.
Las Servilletas: Deben combinar con los colores del mantel y se colocan dobladas sobre el plato principal.
La Vajilla: El plato base es sólo un soporte y es de mayor tamaño que los demás. Estos últimos se escogerán de acuerdo con el menú seleccionado.
Los Cubiertos: Se colocan de afuera hacia adentro, en el orden en que van a ser utilizados. Los tenedores a la izquierda, cuchillos y cucharas van al lado derecho. Los cuchillos se colocan con el filo hacia adentro.
Por lo general, es necesario utilizar tres copas: una para el agua, una para el vino tinto y una más para el vino rosado o blanco.
- El agua debe ser servida antes de pasar a la mesa.
- El vino tinto se sirve a temperatura ambiente.
- Los vinos blancos y rosados se sirven fríos.
- Al servir el postre, se deben retirar todos los demás platos.
- El café y el té se deben servir en otro lado diferente al comedor, por ejemplo, la sala.
Celebraciones Especiales

generales para colocar los platos y
cubiertos.
En cuanto al día de Acción de Gracias, me encanta decorar mi mesa con colores tierra, no acostumbro a usar mantel, ya que uso una decoración bastante llamativa en colores naranja y verde olivo.
Recuerda, el arte de una mesa bien puesta siempre resulta agradable. Serás una anfitriona admirada y elogiada por conseguir un entorno propicio. No existe nada mejor que una mesa bien decorada y puesta para disfrutar de una exquisita comida.
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